sábado, 25 de enero de 2014

El Valle de los Recuerdos - de la zaga Los viajes de Einar

Cuento de Fernando Murano 
de la zaga Los viajes de Einar


Einar se apresuró a juntar el último canasto de naranjas. No había tiempo que perder, de un momento a otro llegaría su tío Nasvir y controlaría con minuciosa severidad la cosecha del día y de la semana. Resultaba imperativo dejar todo preparado para que, al arribar su tío, encontrara las canastas de mimbre estibadas en su lugar, los viejos carros, con los que repartían la fruta engrasados, el granero  limpio y ordenado. Todo debería quedar de acuerdo a las extensas y estrictas normas que abarcaban el total del proceso de producción y comercialización de la cosecha y que a la campiña le habían valido el reconocimiento de “mejor productora frutícola” de toda la comarca. Einar apreciaba mucho el profesionalismo de su tío, sin embargo, las rigurosas reglas que establecía en la campiña, le restaban tiempo a su mayor pasión: realizar viajes y expediciones a lugares desconocidos.

jueves, 23 de enero de 2014

De los Hobbits


Del prólogo de El Señor de los Anillos


Los Hobbits son un pueblo sencillo y muy antiguo, más numeroso en tiempos remotos que en la actualidad. Amaban la paz, la tranquilidad y el cultivo de la buena tierra, y no había para ellos paraje mejor que un campo bien aprovechado y bien ordenado. No entienden ni entendían ni gustan de maquinarias más complicadas que una fragua, un molino de agua o un telar de mano, aunque fueron muy hábiles con toda clase de herramientas. En otros tiempos desconfiaban en general de la Gente Grande, como nos llaman y ahora nos eluden con terror y es difícil encontrarlos. Tienen el oído agudo y la mirada penetrante, y aunque engordan fácilmente y nunca se apresuran si no es necesario, se mueven con agilidad y destreza. Dominaron desde un principio el arte de desaparecer rápido y en silencio, cuando la Gente Grande con la que no querían tropezar se les acercaba casualmente, y han desarrollado este arte hasta el punto de que a los Hombres puede parecerles verdadera magia. Pero los Hobbits jamás han estudiado magia de ninguna índole y esas rápidas desapariciones se deben únicamente a una habilidad profesional, que la herencia, la práctica y una íntima amistad con la tierra han desarrollado tanto que es del todo inimitable para las razas más grandes y desmayadas .